
Cuando pensamos en la mitología griega, a la mayoría de nosotros nos vienen automáticamente nombres como Zeus y Apolo. Sin embargo, no eran los dioses originales que los griegos adoraban. Asimismo, ellos fueron creados por dioses. Antes de los Doce Dioses del Olimpo, estaban los Titanes. En la mitología también se les conoce como los dioses ancianos. Los Titanes gobernaron sobre la Tierra y el Cielo hasta que fueron derrocados por sus nietos, los olímpicos.
Hay muchas versiones diferentes del surgimiento de los dioses ancianos y de los olímpicos, pero todos comienzan con una figura, la Madre Tierra. Gea, la Diosa de la Tierra, nació de Caos, emergiendo al principio de la creación. Junto con ella, surgieron los hermanos Tártaro y Eros. De su vientre brotaron los elementos del mundo. Sólo Gea creó a Urano, el dios del Cielo o del Paraíso, y luego se unieron para producir a los otros Titanes. Algunas versiones dicen que Ponto, el dios del agua, surgió de su unión al igual que los otros dioses de los elementos, incluyendo el dios de la luz, Hiperión, y otros dioses que produjeron las criaturas mitológicas sobre las que leemos hoy. Otras historias dicen que Ponto era su hermano.
Antiguos dioses griegos
Aunque Gea creó a su marido Urano, ella fue también la que estuvo detrás de su muerte como Rey. Urano había encarcelado a los Cíclopes y a los Ecatónquiros, seis hermanos gigantes de los Titanes. Enfurecida por esto, Gea animó a su hijo Crono y a sus hermanos a rebelarse contra Urano y librarle de su poder. Cuando el dios del cielo descendió a la Tierra, Crono lo castró con una hoz mientras cuatro de sus hermanos sujetaban a Urano.
Crono entonces arrojó los genitales del antiguo rey al océano de donde surgió la diosa del amor, Afrodita. Sus hermanos gigantes fueron liberados del vientre de Gea donde Urano los había encarcelado, temiendo una rebelión como esta. Se desconoce el destino final de Urano, se cree que una vez impotente se retiró de la Tierra o murió de sus heridas. La castración de Urano es el acontecimiento que separó el cielo de la tierra.
Después de la separación, Gea produjo descendencia con su hijo Ponto. En otras versiones se apareó con su hermano Tártaro para tener más hijos. Gea fue el elemento primordial del que se originaron todos los dioses adorados por los antiguos griegos. Eventualmente fue reemplazada por otros dioses más nuevos. En la historia romana se la conoce como Terra o Tellus.
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Hefesto

Hades

Artemisa

Atenea

Ares

Apolo

Rea
Primera generación
La Tierra (Gea) fue la gran madre, una creadora. Gea creó y luego se apareó con el cielo (Urano) y el mar (Ponto).
Segunda generación
De la unión de Gea con el cielo (Urano) vinieron los Hecatónquiros (Coto, Briareo, y Giges), los tres cíclopes (Brontes, Estéropes y Arges), los Titanes (Océano, Ceo, Crío, Hiperión, Jápeto y Cronos). y las Titánides (Febe, Mnemósine, Rea, Temis, Tetis y Tea).